Alea llegó a Zarpa con sus cachorritos y llena de inseguridades y miedos. Pero estábamos seguros de que en buenas manos cambiaría mucho.
Y esa persona especial era Tania, lo mejor que a Alea le había pasado.
Vosotros, chicos, habéis sabido darle el cariño y confianza que Alea necesitaba para convertirse en una perra feliz.
Ahora los tres vais a disfrutar de una nueva vida, y Alea será vuestra compañera leal e incondicional.
Muchas gracias por hacerlo así de bien y darle esta preciosa oportunidad a Alea ¡Sois estupendos!