Siempre nos alegran las adopciones pero cuando son adultos los adoptados la alegría es doble.
Adalía ha dado a nuestra pequeña Boira su segunda oportunidad de ser feliz.
Boira eres una gata preciosa y una vez que te hemos sabido entender te has convertido en una gata de las mejores.
En esto ha tenido mucho que ver Mónica, su casa de acogida durante todos estos meses.
Mónica, cuando nadie quería acogerla fuiste la única que te atreviste y convirtieses a Boira en la gata que es hoy.
Gracias a las dos.
¡Boira, te deseamos lo mejor!